Una Chenin Blanc exóticamente aromática, aromas tensos y vibrantes, cascara de lima fresca, fragantes gardeni<s, toques de pera y manzana madura.
Al paladar, redondo, con la frescura que le aporta la fruta, con un poco de dulzura. Bastante complejo, de final largo.
10 meses de crianza en roble frances.